Durante el semáforo epidemiológico en color naranja, las autoridades municipales de Benito juárez decidieron apagar el alumbrado público de diversas partes de Cancún, con el fin de inhibir que las personas salgan y disminuir los contagios de Covid-19.

Sin embargo, se han reportado asaltos en estas zonas, lo que afecta a trabajadores turísticos que llegan al centro de la ciudad después de las 10 de la noche, cuando termina su turno laboral.

Solo se observan las luces de los negocios, como es el caso de la zona del Crucero, pero después de las 9 de la noche, cuando cierran, las calles quedan totalmente oscuras.

Si bien, esta medida de las autoridades busca que las personas no salgan a la calle en las áreas calificadas de alto riesgo de contagio, pero trae consigo otros efectos negativos, como el incremento de la inseguridad.

Varias personas han reportado haber sido asaltadas al llegar de sus centros de trabajo después de las 10 de la noche.

Tanto hombres como mujeres del sector turístico, están expuestos a ser víctimas de malhechores, quienes protegidos por la oscuridad en las calles, cometen sus delitos.