Bad Bunny llegó a un juego de la NBA con un look totalmente cubierto de la cabeza para evitar ser reconocido.

Llevaba una capucha de color café que sólo permitía ver el área de los ojos, sin embargo traía lentes oscuros que impedían verlos.

Además de un suéter Gucci y pantalón de mezclilla para tratar de pasar inadvertido, estuvo sentado en primera fila y custodiado por personal de seguridad.

Cabe recordar que desde la polémica por el celular el cantante puso privada su cuenta de Instagram y ha evitado apariciones públicas.

A diferencia de otras veces, en esta ocasión ningún fan se acercó a saludarlo: solo estaban interesados en grabarlo desde lejos para exhibirlo en redes.

Aquí los momentos captados por las redes sociales de la NBA: