La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) presentó pruebas suficientes para demostrar que la pequeña Jimena Sarahí, de tan solo 14 años, murió por causas violentas el pasado 5 de noviembre en Ixtapaluca y no por un accidente como quisieron demostrar sus presuntos agresores.

Durante la audiencia de auto de vinculación a proceso, Jesús Ángel “N”, de 23 años, quien era tío y quien además decía quera pareja sentimental de la menor, ejerció su derecho a declarar y aseguró que Jimena se cayó mientras se bañaba y se echó el agua hirviendo encima.

Detalló que, al escuchar el golpe, él, su hermano Manuel Yovani “N” y su padrastro Braulio “N”, quienes también están imputados, intentaron ayudar a la menor y la trasladaron a un hospital de la zona, pero ya no contaba con signos vitales.

Fiscalía desmiente declaración

Sin embargo, peritos de la Fiscalía mexiquense determinaron que Jimena Sarahí no pudo morir a causa de una caída, pues la necropsia indica que sufrió una luxación y laceración medular por una rotación de cuello, lo que provocó el desprendimiento de la cabeza.

De acuerdo con la indagatoria, Jimena fue sometida a tortura, pues aún con vida su cuerpo estuvo en posición de cuclillas dentro de una tina con agua hirviendo que le dejó quemaduras de segundo grado en el 48 por ciento de su cuerpo y desprendimiento epidérmico.

Luego de varios minutos en el agua, una persona habría ejercido fuerza en su cuello practicándole un “chinazo” que fue lo que finalmente le ocasionó la muerte.

“La niña se quejó mucho del dolor porque primero la quemaron y después la mataron, pero está muy bien lo que el juez dijo ahorita porque ya se fueron vinculados a proceso”, aseguró Gabriela tía abuela de la menor.

Te puede interesar: en 10 segundos niños ladrones de motocicletas se roban tu celular

La autoridad judicial con sede en Chalco determinó vincularlos a proceso, pues calificó de suficientes las evidencias presentadas por el Ministerio Público y deshecho las pruebas de la defensa de los señalados.

Además fijó dos meses como plazo para el cierre de la investigación, tiempo en el que los tres señalados deberán permanecer recluidos en el Centro Penitenciario y de Reinserción Social con sede en Huitzilzingo, Chalco.

La vida de Ximena estuvo marcada por abusos, ya que, a la edad de 14 años, dio a luz a un niño como resultado de los presuntos abusos de su tío, Jesús Ángel “N”, ocho años mayor que ella. Fue torturada 15 días después del parto.

La familia de la menor pidió a las autoridades investigar también a la madre de la menor y la abuela quienes presuntamente consistieron la relación entre la menor y el adulto. La madre se encuentra prófuga.

Presuntamente Jesús N desde tres años atrás abusó de la menor, hija de su cuñada, aprovechando que todos vivián en la misma casa. La madre había huido junto con ella de la casa del padre de la menor refugiándose en un nuevo hogar junto con sus hermanos y su padrastro de la niña. Es decir, inició a abus@r de ella desde que tenía once y la embarazó a los 13 años.

La menor en una ocasión huyó hacia la Fiscalía para denunciar la tortura a la que era sometida, sin embargo su familia llegó asegurando que sufría de esquizofrenia. Sorprendentemente las autoridades policíacas se negaron a investigar este hecho, dando por sentada la versión de su propia madre. No se realizó una prueba para investigar el abuso debido a que la perito encargada de estos temas se encontraba de vacaciones.

En otras tres ocasiones intentó huir del lugar pero era encontrada y golpeada cada vez como castigo.

El menor se encuentra por el momento bajo la tutela del DIF local.