Un grupo de presuntos narcotraficantes llegaron a las instalaciones de un hospital para reclamar la filtración en Twitter de las imágenes del cuerpo sin ropa de “Ina, la reina narco”cuyo nombre verdadero es Sabrina Durán.

Cabe señalar que durante la mañana del martes 24 de octubre, tres desconocidos asesinaron a Sabrina Durán Montero, conocida en las redes sociales como “Juakina Guzmán” en la comuna Padre Hurtado. Se aseguró que se trató de un ajuste de cuentas, debido a que ella pertenecía a un grupo rival que había concretado una alianza con un cartel mexicano.

Sabrina se encontraba en libertad condicional tras ser liberada por un juez de manera extraña, tras su detención hace un par de meses en poseción de varios kilos de droga y armas. “Juakina Guzmán” presumió su libertad en redes sociales, asegurando que era “intocable”.

Detrás de la asesinato del joven influencer de 24 años -quien recibió al menos siete impactos de bala-, en internet comenzó a circular el vídeo de su muerte así como fotografías de ella siendo atendida en un hospital de Chile.

Además de que su cuerpo desnudo pero sin vida fue también compartido en la red social X, antes conocida como Twitter. Como se puede observar, al menos tres médicos se encuentran al lado del cuerpo de la joven tiktoker, mostrando algunas de las lesiones que recibió en eso ataque. (En Informado Caribe no podemos mostrarte la imagen por cuestiones de censura, pero puedes encontrarla en Twitter con las palabras clave “Sabrina Durán cama de hospital”.

En ese sentido, un grupo de presuntos narcotraficantes Llegaron a las oficinas del SAPU para protestar por la filtración fotos de Ina, la reina del narco. Se mencionó que sometieron a enfermeras, doctores y hasta pacientes para averiguar quién había tomado y enviado las fotos.

Además del grupo de narcotraficantes, autoridades se pronunciaron de manera pública sobre la filtración del fotografías de Juakina Guzmán en el hospital indicando que condenaron el hecho y que comenzaron las investigaciones para dar con los responsables. También exigieron a las autoridades a que no vuelvan a permitir este tipo de hechos, arugmentando que “dañan” sus derechos humanos.

Momentos después la Fiscalía local declaró que fueron secuestradas las familias de los presuntos culpables de enviar las fotografías de la jóven, por lo que ya están siendo buscados.