Marcelo es taxista desde hace siete años y opera en un sitio del sindicato Andrés Quintana Roo. Todos los días debe pagar 300 pesos de extorsión a un grupo delincuencial que le exige esa cuota para dejarlo trabajar. Cobro de piso, le llaman.

En el momento en que llegan a cobrarle, él está con otros taxistas del sitio y el modus operandi se ha repetido desde hace varios días.

“Esa cuota la entregamos a una persona que recoge el dinero, pero antes esa persona decomisa todos los celulares y revisa que no andemos de soplones. Si descubre algo, hay consecuencias, pero primero elimina los mensajes y, después, que Dios te ayude”, afirma.

Cuando llegan a cobrarles y les quitan el celular a todos, sienten miedo y se preocupan, pues saben que con sus cobradores no se pueden cometer errores. Marcelo teme más por su familia, pues es el único sostén económico.

La preocupación es mayor porque, si ahora son 300 pesos, el próximo año podrían cobrarle más, lo que impactaría sus ingresos.

“Ha pasado que, en años seguidos, como el 2021 y 2022, han matado a taxistas, sí algunos estaban metidos por vender, pero otros porque no quisieron alinearse o quisieron trabajar sin pagar, sí hay miedo en todo momento, pero mientras cumplas, no pasará nada”, dice.

Por ahora trabajan con relativa tranquilidad en el sitio de taxis y, mientras paguen la cuota, nadie los molesta. “Aquí hay algo muy seguro: o pagas o pagas”.

De las extorsiones a los taxistas están enterados el Sindicato Andrés Quintana Roo y las autoridades de Seguridad Pública. Un representante sindical asegura que se realizan operativos periódicos con apoyo de las autoridades estatales y municipales y la Policía Ministerial de Investigación.

“Quiero recalcar que nosotros realizamos diversos operativos en la ciudad, en coordinación con autoridades, ya que los taxistas son muy atacados por la delincuencia, donde la mayoría de los casos son por robo de vehículo, en donde hemos localizado las unidades sin algunas piezas o son usadas para delinquir”, afirma.

Hay temor en el gremio, agrega, aunque muy pocos se atreven a interponer alguna denuncia de manera formal por el cobro de cuotas por parte de la delincuencia organizada. Este año, la Fiscalía General del Estado recibió algunas denuncias y confirmó que ya estaban siendo investigadas.

En septiembre de 2021, cientos de operadores bloquearon la entrada a la Zona Hotelera de Cancún, en donde exigieron a las autoridades seguridad y justicia, ya que estaban siendo extorsionados por el crimen organizado.

Tan sólo en ese mes, más de 15 taxistas fueron asesinados a balazos, unos cuantos más hallados en zonas de maleza.

En 2022, a principios del año, de nuevo comenzó la cacería de taxistas, dejando al menos una decena de fallecidos.

12,000 taxistas hay aproximadamente en Cancún

8,600 unidades ofrecen servicio todos los días

“Sí hay miedo en todo momento, pero mientras cumplas, no pasará nada”, dice Marcelo, taxista.