La AMDA aseguró que no recomiendan comprar el llamado “auto más barato del mundo” debido a su alto costo de importación, incumplir las normas de seguridad. y la imposibilidad de manejarlo por las calles de las ciudades.

El presidente nacional de la AMDA señaló que comprar un auto chino es como adquirir un “producto milagro” que promete bajar de peso sin hacer ejercicio”, esto debido a que no cumple lo que promete: aseguran ser baratos pero al final incrementa su costo de manera exponencial al importarlo, carece de soporte y garantías, ni hay quienes respondan por la inversión.

Declaró que e acuerdo con lo publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) a partir del 1 de enero del 2024, los autos nuevos deberán cumplir con una serie de requisitos, sin embargo explicó que esto no aplica para el ChangLi S1 debido a que no es considerado un automóvil.

“Por carecer de todas las medidas de seguridad, de un motor de combustible, su forma y tipo, es más bien considerado un cuadriciclo. Sin embargo esto sólo provoca que no pueda ser emplacado, aunque puede obtener un permiso especial para ser conducido en determinadas áreas”, declaró.

Señaló que las leyes de movilidad determinan que vehículos como este tipo, al igual que los carritos de golf y cuatrimotos, no pueden circular en las vías primarias: es decir centro de la ciudad, avenidas, etc., por lo que están restringidos a zonas rurales, periferia de la ciudad, etc.

“Pero con los 65 mil pesos que te cuesta traerlo a México, mejor te compras un carro de segunda mano”, declaró.